VACÍATE

Filipenses 2:5-7 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, 6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, 7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;

Haya, pues, en vosotros este sentir… ¿Qué es lo que ha de haber en nosotros? ¿Qué hay en nosotros? ¿Qué hay dentro de mí? ¿Te los has preguntado? Yo no se que es lo que hay, pero Pablo dice «haya, pues, en vosotros este sentir…» En ocasiones expresamos frases como «ay, es que no lo siento, no siento hacer tal cosa, no siento orar, no siento dar mi testimonio, no siento participar, etc…»

La palabra usada por Pablo es fronéo y nos está hablando de ejercitar la mente, de entretener o tener un sentimiento o una opinión. Pablo está usando esta palabra para decir piensen en esto, sientan esto, sean solícitos en esto, pongan la mirada en esto, hagan caso de esto, cuiden de esto…

Así que Pablo nos está instando, exhortando a no quedarnos en lo que nosotros sentimos, sino que nos exhorta a tener una manera concreta de pensar, a cuidar algo importante, lo que hay dentro de nosotros, en nuestra mente. ¿Cómo es tu manera de pensar de manera general? De la vida, del cristianismos, de los demás, de la necesidad, de cuando te ofenden, etc. ¿Crees que tienes derechos? ¿Estás creyendo que tienes la libertad de decidir lo que a tí te apetezca hacer o no hacer? No es lo que Pablo nos dice. El exhorta: «Haya, pues vosotros este sentir… un sentir concreto, no conforme a nuestra voluntad, no conforme a la naturaleza caída, no conforme al viejo hombre viciado…

…que hubo también en Cristo Jesús. Ya no es mi sentir, ya no es mi manera de pensar, mi opinión, mi voluntad o mi derecho. Pablo dice que nuestra voluntad, nuestro pensamiento, actitud, opinión debe ser el que hubo en Cristo.

Pablo está usando la palabra griega kaí para decir: «de la misma manera que en Cristo, así como en Cristo.» Si usted en verdad es su discípulo, si sigue a Jesús deber saber como siente Cristo, como opina Cristo, como vivió, como actuó, como obró en determinadas situaciones buenas y malas e imitarlo. Sino, ¿a quién está siguiendo? porque a Cristo no. ¿De quién es usted discípulo? Porque de Cristo no. Yo no me imagino a Cristo decirle al Padre: «Ay, es que no siento ir a la Cruz, no siento que me azoten, o ni siquiera dejar mi gloria para hacerme un hombre…» De hecho fue todo lo contrario. Cristo expresó: No se haga lo que yo quiero, sino tu voluntad.

Para no alargar mucho esto quiero ir al verso 7 y ver cuál fue el sentir de Cristo que nosotros debemos adoptar. Hay otras cosas, pero me gustaría fijarme en esta…

v.7) Sino que se despojó a sí mismo… Pablo está usando la palabra gr kenóo para hablar de «vaciarse». Cristo se vació a sí mismo. Se vació de su derecho a ser Dios. No dejó de ser Dios, pero se vació en el sentido de que no echó mano a ello para vengarse cuando pudo haberlo hecho. Se vació de su capacidad para acabar con sus enemigos, se vació de su capacidad de bajar de aquella Cruz, se vació de su derecho a defenderse delante de Pilato o del mismo pueblo. Cristo se vació de todo aquello que podría haber sido un impedimento para cumplir su propósito. Su propósito eras tú y yo.

Así que Pablo está diciéndonos, dándonos la orden, el mandato de que en nosotros «debe haber este sentir, esta misma manera de pensar, esta actitud». ¿De qué necesitas vaciarte? ¿Qué hay dentro de ti, en tu manera de pensar, en tu actitud, en tus opiniones que puedan ser un obstáculo para cumplir el propósito de Dios? ¿De qué necesitas vaciar tu mente, tu corazón?

Si usted ha decidido seguir a Cristo, ¡¡vacíese!! Vacíe su corazón, su mente de todo argumento contrario a la Palabra (2Co 10:4-5), vacíe sus pensamientos de lo que no edifica su vida, el Cuerpo de Cristo, la Iglesia, al prójimo, su familia. ¡¡Vacíate!! y haya en tí el mismo sentir, pensamiento, actitud que en Cristo. Decida hacer la voluntad de Dios y no la suya. Decida rendir su derecho a Cristo. Decida rendir su derecho a vengarse, a justificarse, a ir o no ir, a hablar o callar. Deje que Cristo sea su modelo, decida seguir a Cristo no a la manera religiosa, mundana o cultural. Decida seguir a Cristo a la manera de Dios, a la manera bíblica.

Hoy, decide vaciarte y que el Espíritu de Cristo le llene, pensamiento, alma, espíritu, todo su ser.

Rafa Boix