Palabras de David Wilkerson

En muchas Iglesias los sermones no son suculentos ni difícil de tragar. Nada de lo que se dice ofende jamás a nadie. No resulta difícil llevar consigo el Domingo a un cónyuge o amigo porque no se va a sentir incómodo. Nadie lo comfrontara acerca del pecado. No habrá carbones encendidos del altar de Dios … Continúa leyendo Palabras de David Wilkerson